Peligro de cárcel... La Dignidad no se transa

Con fecha 19 de Marzo, se llevó a cabo la Audiencia de Apercibimiento en el Juzgado de Garantía de San Bernardo, con el fin de conminar al Dr. Milton Flores a tomarse una muestra biológica para incluirlo a perpetuidad en el registro nacional de ADN criminal, un registro creado para tener un modo rápido de identificación de delincuentes peligrosos.

En octubre del año pasado el Dr. Flores se presentó al Servicio Médico Legal, pero al ser consultado si estaba disponible para la toma de muestra, se negó, dispuesto a asumir las consecuencias.

Y las consecuencias se hicieron ver el día de hoy.

La Juez de Garantía, no estuvo en condiciones de mirar desde la obligación constitucional primera que pesa sobre ella: respetar y promover los Derechos Esenciales de la Persona, aún cuando esté condenada, y ordenó nuevamente la diligencia de toma de muestra, bajo la amenaza de iniciar una nueva causa por Desacato, cuya pena comienza en 541 días hasta 5 años, y en este caso él no tendría la atenuante de irreprochable conducta anterior, ni derecho a beneficio. Al menos no accedió a la petición del Ministerio Público para formalizarlo en el acto por este delito, y con ello precipitar la revocación del beneficio de firmar mensualmente en lugar de cumplir los 541 días privado efectivamente de libertad. Pero es cuestión de tiempo, porque no está en la voluntad del Dr. Flores incluirse en un registro de este tenor.

El asunto es serio, es grave, y no solo porque arriesgamos la cárcel.

Ya no se trata de castigar un delito, sino de someter una Conciencia, de doblegar un Espíritu, que es como seguramente muchos se han sentido cuando han sido conminados a comulgar con ruedas de carreta, a conducirse por el absurdo. Es abuso, es vulneración del Derechos Humanos, es falta de probidad de parte del Estado en el cumplimiento de su obligación.

A juicio de la Defensoría Penal Pública, la orden emanada del TOP de San Bernardo para la toma de muestra e ingreso al registro de ADN criminal, es un asunto administrativo, que no constituye parte de la pena y por tanto el Juez de Garantía si era competente para dejarla sin efecto, sin comprometer la cuestión de fondo que ya fue sanjada por el TOP con la dictación de la sentencia, y que nuestro sistema judicial no permite sea revisada por un Tribunal Nacional superior -porque no existe derecho al recurso en el segundo juicio para quien hubiese pedido la nulidad del primero- dejando con ello desprotegida y sin defensa a la Persona que ha sido condenada, lo que en sí mismo constituye una vulneración. Pero la Juez no lo estimó así, y siguió adelante razonando sin incluir en el análisis la posibilidad que se planteó, omitiendo la posibilidad de que pudiese tratase de un error y por tanto una injusticia, que deja ello sin Justicia auténtica, verdadera, lúcida, que resuelva con inteligencia y no simplemente castigue, vulgarizando, pervirtiendo el potencial humano.

En efecto el ingreso al registro en este caso no corresponde al delito por cuál fue condenado el Dr. Flores, Cultivo de Cannabis sin Autorización del SAG, ni a la pena que le fue asignada, 541 días, por tanto se trata de un error por parte del Tribunal Oral en lo Penal de San Bernardo, por segunda vez, ya que lo mismo sucedió al asignarle la pena accesoria de inhabilidad perpetua para ejercer Derechos Políticos, lo que fue corregido por el propio Tribunal al día siguiente de haberse leído la sentencia. Los jueces pueden equivocarse, de hecho lo hicieron y se rectificaron, aún cuando ya era cosa juzgada.

Que se aplique la ley es justamente lo que estamos pidiendo, que se respete el Derecho y que se aplique la Ley, con inteligencia, sin arbitrariedad, con fundamentos jurídicos, con argumentos científicos, con lógica y sentido común, como es la obligación específica que pesa sobre los Jueces.

La posibilidad de la cárcel está nuevamente muy cerca. Es un riesgo, vamos por un filo, pero no hay otro modo. Convicción y consecuencia. Tenemos, con todos los que se van sumando, un propósito trascendente, elevado, una auténtica utopía, no para soñarla, ni para pedirla, ni para pelearla, simplemente para hacerla realidad.

De lo que se trata es de incluir la Dimensión del Espíritu, aquella en donde reside nuestra dignidad, para vivirla cotidianamente, protegido su cultivo por Políticas Públicas impregnadas de una comprensión más esencial, más científica, moderna y al mismo tiempo ancestral, de la naturaleza humana, desde donde emerja un servicio, una actuación de parte del Estado y de los Ciudadanos que tenga como propósito y requisito la Conciencia, comprendida como una cualidad del funcionamiento humano.

En este proceso de transformar el paradigma no somos espectadores, somos actores, protagonistas, aprovechando toda oportunidad para buscar cómo es posible vivir con Dignidad, qué es vivir desde el Espíritu, exigiéndonos ofrecer un contacto que invite a buscar con más determinación los ajustes que necesitamos, y que nos dejarán en verdad satisfechos, sin falsas bondades.

Están informados, estamos en contacto, mantengámonos conectados, para hacer esta fuerza juntos,

UNIDOS PARA IR POR TODO

LIBERTAD PARA LOS PRESOS POR PLANTAR

DESPENALIZACIÓN DEL AUTOCULTIVO

Un abrazo enorme desde Águila Sur.