Los estamos esperando.
Paulatinamente ha ido precipitando coraje en los
guerreros de la luz, y van de a poco visibilizándose con más propiedad para asumir
el cultivo de lo esencial con Enteógenos, como algo natural, y en el marco de
libertades fundamentales garantizadas por la matriz jurídica, la que no siempre
recibe la atención esencial requerida por parte de los que administran
justicia, sin embargo, no es menos cierto que la demanda para recrear las
identidades, que surge frente a individuos, familias o instituciones, puede
resultar insoportable, no comprenden y prefieren descalificar la propuesta,
incluso en algunos casos, también a quienes se encuentran proponiendo, es
comprensible, los egos, las estructuras, las identidades se deben recrear, el
rol del médico, del profesor, del ciudadano, del político. Una institución de
corte religioso, de la que recibimos muchas enseñanzas, desconoce la presencia
de la verdad, y se relaciona con nosotros desde cálculos políticos, negociaciones,
transando, sin conciencia, la verdad y la transparencia como atributo, en su proceder.
¿Utilizamos o no Plantas Enteógenas para cultivar el espíritu? la institución al
servicio del proceso, si el proceso en su esencia se ve comprometido para
proteger la institución, ella funcionalmente ya no sirve.
Libertad siempre, sin dejar de ser agradecidos, matrices
que perpetúan su identidad, comprometiendo la creatividad del viaje, se rompen
finalmente, por rígidas, por disfuncionales, con el fuego de la transformación,
solo la esencia permanece, cuando la institución irradia espiritualidad la
transformación no la atemoriza.

Les estamos esperando, unidos venceremos la ignorancia, y
así servir al bien común.
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